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Identificaciones genéticas:

Con el objetivo de identificar los restos exhumados, estamos realizando los análisis genéticos pertinentes en el grupo de Investigación BIOMICs de la Universidad del País Vasco UPV/EHU, altamente especializado en genética forense.

 

Los perfiles genéticos de los restos se contrastan con los obtenidos de muestras de saliva de los familiares, para poder establecer así posibles relaciones de parentesco.

 

El proceso de identificación es muy complicado así como costoso. Los restos se encuentran deteriorados, lo cual añade dificultad a la extracción y análisis del ADN. Además, se suma la dificultad de que la comparación de los perfiles genéticos obtenidos debe hacerse con los familiares, en muchas ocasiones, lejanos. Esto obliga a realizar un gran número de análisis para llegar a alcanzar una identificación positiva. Todo ello requiere una alta inversión económica.

 

Sin embargo, gracias a la perseverancia de las familias se han conseguido identificar 15 cuerpos. Por lo que aún quedan más de 100 familias pendientes de la identificación de su/s pariente/s.

 

 

Proceso de identificación genética:

Pretratamiento, limpieza y extracción de ADN de muestras esqueléticas

 

El análisis de muestras óseas y dientes presenta las siguientes etapas:

- Pretratamiento y limpieza de las muestras: en esta fase se pretende eliminar la contaminación superficial presente en las muestras mediante la limpieza exhaustiva de la misma por lijado y lavados con lejia, agua estéril y etanol (en el caso de dientes).

- Corte y pulverización: en el caso de muestras óseas, se corta un pequeño fragmento del hueso para continuar con el análisis. Seguidamente, los fragmentos de hueso y los dientes se pulverizan en un molinillo criogénico con nitrógeno líquido. La muestra pulverizada se utilizará para realizar la extracción de ADN.

 

Análisis de marcadores genéticos. Importancia de las muestras de familiares de referencia

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Tan importante como obtener ADN de buena calidad a partir de los restos exhumados es disponer de buenas muestras de referencia con las que cotejar los resultados para poder llegar a realizar una correcta y certera identificación de los mismos. En una situación ideal, los familiares más adecuados para llevar a cabo la identificación de una persona son sus padres. Sin embargo, en este caso, debido al tiempo transcurrido, resulta imposible disponer de este tipo de muestras de referencia.

Por este motivo, es necesario tener en cuenta la manera en la que se transmite y hereda el ADN para poder seleccionar a los familiares cercanos que se encuentren disponibles y que mayor información genética puedan aportar. En función de los familiares disponibles, por lo tanto, se realizará el análisis de unos marcadores genéticos u otros (microsatélites de los cromosomas autosómicos y/o sexuales X e Y, así como el ADN mitocondrial).

Cotejo de perfiles genéticos
 

 

La última etapa, una vez realizado el análisis genético, consite en la comparación de los perfiles genéticos de las muestras óseas o dientes con los perfiles genéticos de los familiares de referencia. Esto implica un cálculo estadístico que proporcionará la probabilidad de parentesco entre las muestras esqueléticas y las de los familiares de referencia. 

 

Asimismo, la comparación de perfiles genéticos de cromosoma Y y ADN mitocondrial nos indicará si los restos esqueléticos y las muestras de referencia pueden pertener al mismo linaje patrilineal o matrilineal, respectivamente.

Acto de dignificación de las víctimas enterradas en La Pedraja:

El 1 de noviembre de 2014, con motivo del día de los difuntos, los restos de las 135 personas fusiladas y enterradas en las fosas de La Pedraja fueron trasladados a un panteón del cementerio del municipio de Villafranca Montes de Oca. El panteón ha sido sufragado por el representante de la Agrupación de Familiares de Personas Asesinadas en el Monte de La Pedraja, Miguel Ángel Martínez, a falta de ayudas económicas externas.

 

Familiares y amigos se reunieron en el camposanto para rendir homenaje y poner nombre y apellidos a los restos que fueron apareciendo en los trabajos de exhumación realizados en el monte de La Pedraja durante los años 2010 y 2011.

 

Uno a uno, y en manos de los suyos, las 135 cajas -la mayoría con restos sin identificar- fueron introducidas en un panteón ubicado a la entrada del pequeño cementerio. Las familias que quedan pendientes de encontrar a los suyos también acudieron al acto, muchas afirman que «seguirán luchando hasta que se haga justicia».

 

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